Las varices son venas hinchadas y retorcidas, generalmente de color azul o amoratado, que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo a pesar de que son más comunes en las piernas. Se consideran un tipo de insuficiencia venosa, ya que surgen por el mal funcionamiento de las válvulas internas de las venas, lo que provoca acumulaciones de sangre y, como consecuencia, hinchazón. Aunque afectan principalmente a mujeres, especialmente a medida que envejecen, los hombres también pueden padecerlas al ir sumando años.
Con mucha frecuencia, las varices se suelen ver como un problema estético, pero en realidad se trata de un problema que puede generar distintos tipos de molestias, dolores, calambres y sensaciones de hormigueo, entre otros síntomas leves. En algunos casos, las varices son peligrosas, ya que pueden derivar en complicaciones graves. Por ese motivo, en este artículo, te vamos a mostrar las cinco señales de alerta que pueden indicar que necesitas tratarlas con urgencia con un especialista.
No todas las varices requieren tratamiento inmediato, pero sí que es cierto que hay ciertos síntomas que pueden indicar que existe un riesgo importante para la salud. Si presentas alguna de las siguientes señales que te vamos a mostrar a continuación, es de vital importancia que acudas a un especialista para evitar complicaciones en el futuro. Por ello, si tienes varices, te vamos a mostrar cuándo preocuparse:
Si las varices provocan un dolor muy intenso o hacen que tus piernas estén tan hinchadas que te impidan moverte con normalidad en el día a día, podría tratarse de un signo de insuficiencia venosa avanzada. De hecho, la dificultad para caminar o realizar actividades cotidianas suele ser un signo de que la circulación sanguínea es muy deficiente y que, por lo tanto, necesitas que te vea un especialista cuanto antes, sobre todo, antes de que aparezcan otras complicaciones más serias, como coágulos de sangre o úlceras venosas.
Como acabamos de comentar, las varices pueden aumentar el riesgo de desarrollar trombosis venosa profunda (TVP) o tromboflebitis, que se produce cuando un coágulo de sangre obstruye una vena profunda. Esto puede generar hinchazón, dolor agudo y el enrojecimiento de la pierna afectada. Si un coágulo se desprende de la zona afectada y migra a través del canal circulatorio hasta el pulmón, puede provocar una embolia pulmonar, una condición que es potencialmente mortal. Por lo tanto, para evitarlo, siempre conviene acudir a un flebólogo profesional para tratarlas a tiempo con microespuma de varices o, directamente, extraerlas mediante una flebectomía.
El eccema varicoso, también conocido como “dermatitis varicosa” es una afección de la piel que se suele presentar en personas con varices en un estadio avanzado. Se suele reconocer por el enrojecimiento, la sequedad, la descamación y la aparición de una sensación de picazón en la piel de las piernas, síntomas similares a los que podemos encontrar, por ejemplo, en la dermatitis seborreica.
En algunos casos, puede derivar en la aparición de úlceras y llagas que pueden complicarse. Cuando aparece el eccema varicoso, suele ser un signo de que la circulación sanguínea es insuficiente y de que necesitas ponerte en tratamiento lo antes posible para evitar las molestias que supone.
Las varices también pueden alterar la coloración de la piel, que, con el paso del tiempo, se puede volver de una tonalidad marrón o violácea. Esto se debe a la acumulación de hierro en los tejidos por la mala circulación. En casos extremos, la piel puede volverse más frágil y desarrollar atrofia blanca, un signo bastante evidente de insuficiencia venosa severa que puede terminar derivando en la aparición de úlceras.
Las úlceras venosas son heridas abiertas que aparecen en la piel debido al ralentizamiento del flujo sanguíneo y a la acumulación prolongada de sangre en las venas. Estas lesiones suelen ser dolorosas y su cicatrización es muy lenta, lo cual aumenta el riesgo de sufrir infecciones graves. Si notas que empiezan a surgir llagas en la zona de las varices, te aconsejamos que acudas a un especialista lo antes posible para tratarlas y mejorar tu calidad de vida.
Como hemos comentado más arriba, las varices pueden parecer inofensivas y sólo un problema estético, pero en realidad pueden derivar en problemas graves si no se tratan a tiempo. Además de aumentar el riesgo de trombosis y de sufrir úlceras venosas, también pueden causar inflamaciones crónicas y daños en los tejidos que pueden ir empeorando poco a poco la calidad de vida de las personas que sufren este problema.
En casos más raros, pueden incluso aparecer varices en el útero en algunas personas, lo cual empeora drásticamente la calidad de vida, ya que puede producir dolor crónico e incluso ocasionar problemas de fertilidad. Tratar las varices a tiempo no solo permite mejorar la calidad de vida, sino que también es fundamental para prevenir la aparición de otras complicaciones graves, como las que hemos ido nombrando.
Por lo tanto, si, podemos decir que las varices son peligrosas para la salud o al menos podrían llegar a serlo en estadios avanzados, por las complicaciones que pueden aparecer junto a ellas. Así que, si notas que sufres este problema, lo más recomendable es acudir a un especialista para que realice un diagnóstico y proporcione la solución que necesitas.
Una rotura de una variz en la pierna, normalmente se suele dar cuando ya existe alguna úlcera y puede causar sangrado muy abundante, ya que las venas varicosas suelen tener una mayor presión que las venas normales. Además, este sangrado puede ser externo, pero en muchas ocasiones, también se produce de manera interna, generando moratones, mareos e incluso desmayos.
A pesar de que este sangrado se suele detener fácilmente aplicando presión directa y elevando la pierna afectada, es fundamental que acudas a un especialista cuanto antes para evaluar cuál es el estado de las varices y, así, evitar futuras complicaciones. Si presentas alguna de estas señales de alerta, no dudes en buscar ayuda profesional. En Varicenter te proporcionamos tratamientos especializados para la eliminación de varices, como la microespuma, que es un método eficaz en el 95% de los casos.
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