Varices en el útero: ¿qué son y por qué salen?
Las varices son venas dilatadas e inflamadas que suelen aparecer en las piernas debido a una mala circulación sanguínea. Es decir, que son una forma de insuficiencia venosa. Esto sucede cuando las válvulas de las mismas, que se encargan de llevar la sangre de regreso al corazón, se debilitan y dejan de funcionar como es debido. Como consecuencia, la sangre queda ligeramente estancada en ciertas zonas, provocando que las venas se ensanchen y que se terminen formando las varices.
Las varices pueden afectar a cualquier persona, pero son más frecuentes en mujeres, en personas que trabajan de pie o que permanecen sentadas durante largos períodos de tiempo, así como en aquellas personas que tienen antecedentes genéticos. Además, podemos decir que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, ya que, además de en las piernas, también pueden aparecer en el útero, causando dolores y molestias durante la menstruación o durante el embarazo. Si quieres saber con más detalles, puedes leer este artículo para saber más al respecto: varices vulvares: qué son y cómo combatirlas.
Asimismo, debemos anotar que, si no se tratan adecuadamente, las varices pueden causar complicaciones graves como ulceraciones, trombosis, y en casos extremos, embolias pulmonares. Por lo tanto, como veremos más adelante, es importante mantener un estilo de vida saludable y tratarlas lo más pronto posible, especialmente antes que se ocasionen complicaciones. Por este motivo, te vamos a explicar todo lo relacionado con las varices en el útero y el tratamiento que existe para eliminarlas y aliviar los síntomas de las mismas.
Varices en el útero: ¿es peligroso padecerlas?
Las varices en el útero o varices pélvicas son venas dilatadas que se encuentran en la pared del útero. A menudo, se producen durante el embarazo debido al aumento de presión en el área pélvica y a los cambios hormonales. Estas venas pueden verse como pequeños bultos y pueden causar algunos problemas, como el dolor abdominal, que resulta especialmente intenso durante la menstruación.
Aunque no suelen ser peligrosas, las varices en el útero pueden ser un indicador de que existe un problema de salud, especialmente a nivel de sistema circulatorio. En casos más graves, pueden causar sangrado excesivo y anemia, lo que puede poner en riesgo la salud de la madre y el bebé durante el embarazo. Por ello, a aquellas mujeres que las padecen se les debe realizar un seguimiento por parte de un profesional sanitario para reducir riesgos.
Si te preguntas si son peligrosas las varices pélvicas, podemos darte algunos datos al respecto. Si bien las varices pélvicas, como hemos comentado, no son peligrosas, es importante informar a un médico si experimentas síntomas como dolor o sangrado excesivo. Se pueden recomendar tratamientos para aliviar el dolor y prevenir complicaciones potenciales.
¿Por qué salen varices en el útero?
Las varices en el útero son una condición médica poco común, pero que puede afectar a algunas mujeres después de haber pasado por uno o más embarazos. Esto ocurre debido a que se produce un aumento del volumen sanguíneo durante la gestación. Esto puede ejercer presión sobre las venas uterinas y causar su dilatación o inflamación. Como resultado, puede comprimir las venas cercanas y dificultar el retorno de la sangre al corazón.
De esta manera, las paredes de las venas se debilitan, se ensanchan y se vuelven más visibles, dando lugar a las varices en el útero. Esta condición puede causar dolor pélvico y aumentar el riesgo de trombosis venosa, así como causar dolor mientras la persona permanece de pie o realiza algún tipo de deporte físico, como, por ejemplo, running. Por este motivo, creemos que es importante que las madres se informen y sigan las recomendaciones médicas para prevenir o buscar un tratamiento efectivo para estas varices.
Ahora bien, si te interesa y quieres ampliar información respecto a este tema, puedes consultar el post varices en el embarazo: cómo cuidarlas y prevenirlas. De esta manera, sabrás aquellas acciones que puedes hacer para cuidarte y prevenir su aparición.
¿Son peligrosas las varices pélvicas?
Como hemos comentado más arriba, las varices pélvicas no son excesivamente peligrosas, ya que no se consideran potencialmente mortales. No obstante, sí que debemos anotar que puede empeorar considerablemente el nivel de calidad de vida. Esto se debe a que puede producir un dolor córnico y constante similar al de una menstruación dolorosa.
Además, su presencia también puede hacer que aparezcan otras varices en la zona de la pelvis e incluso en las extremidades inferiores. Por este motivo, creemos que es importante empezar el tratamiento cuanto antes, de manera que se puedan prevenir la aparición de otras complicaciones más graves.
Así que, si te preguntas si las varices en el útero es algo peligroso, sabes que, como todo, depende de la gravedad de las mismas y del tiempo que haga desde que aparecieron por primera vez, ya que, con el paso de los meses y de los años, generan más problemas.
Varices uterinas: síntomas y tratamiento
Aunque las varices en el útero, en un principio no son demasiado peligrosas, lo cierto es que, como hemos dicho, pueden afectar a tu calidad de vida debido a que las varices uterinas presentan unos síntomas determinados. Entre ellos, podemos citar que pueden provocar un dolor pélvico en la parte inferior del abdomen. Este puede variar en intensidad dependiendo de la gravedad del problema. Asimismo, puede derivar en dolor durante la menstruación y durante la práctica sexual.
Del mismo modo, los dolores pueden extenderse a otras zonas, como, por ejemplo, a la zona de la espalda, especialmente intenso durante las últimas etapas del embarazo. Este problema se puede hacer más doloroso cuando la persona permanece de pie durante períodos más largos. De igual manera, puede producirse un incremento de la micción y aparecer venas hinchadas visibles en torno al área genital.
En cuanto a los tratamientos, debemos nombrar, por ejemplo, que practicar deporte puede tener efectos beneficiosos, especialmente, cuando se trata de ejercicios de bajo impacto que eviten el sedentarismo, así como llevar una alimentación saludable y equilibrada. Del mismo modo, se pueden aplicar algunos alimentos, como, por ejemplo, los antiinflamatorios durante los episodios de dolor más intensos.
De igual forma, para eliminar el problema, se debe realizar mediante una pequeña intervención que no requiere hospitalización. Estamos hablando de la embolización de las venas afectadas. Esto se consigue cerrando el flujo de sangre venosa para eliminarlas y reducir el dolor en una gran proporción.
